Oculta en el cortado norte de los Acantilados de la Piedra y San Adrián, debajo de la antigua canaleta que suministraba agua a la población de Lumbier, se encuentra esta antigua ermita que sufre casi un siglo de completo abandono.
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Ermita de San Adrián (Lumbier, Navarra) |
El Monasterio de Lisabe
Esta ruta comienza cruzando los 40 metros de calzada del puente de Sielva, de origen medieval, que conecta las dos orillas del Salazar a su paso por Lumbier. En la orilla opuesta, en el término de Sielva, se encontraba el ya desaparecido Monasterio de Lisabe, dependiente de Leyre desde el siglo XI. Existirá como advocación de Santa Magdalena hasta 1576, cuando las benedictinas que lo habitan se trasladen a Lumbier debido a las malas condiciones del mismo.
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Puente de Sielva, que conecta el término con Lumbier. |
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Calzada del puente.
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La ermita de Santa Magdalena de Lisabe
Su localización es algo confusa ya que, conforme nos acercamos al cortado encontraremos primero la ermita de Santa Magdalena de Lisabe (ahora reformada), y es habitual dar por supuesto que el camino termina aquí, junto a un antiguo corral propiedad del monasterio que conserva un pequeño muro y que hoy en día todavía da cobijo al ganado. Es al final de este corral dónde realmente comienza el ascenso a la ermita, siempre siguiendo la base de la pared natural.
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Término de Sielva. Tomando el camino de la derecha y siguiendo la base del cortado llegaremos a la ermita. |
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Ermita restaurada de Sta. Magdalena de Lisabe. |
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Interior de la ermita. |
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Antiguo muro que, junto al cortado de piedra, delimita el corral aún en uso. La pared norte presenta a lo largo de todo el recorrido esas bandas negras provocadas por la humedad. Detrás del muro, siguiendo la pared, es dónde realmente comienza el camino de ascenso a la ermita. |
La canaleta de Arbayún
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Canaleta de Arbayún |
Conforme avanzamos por la base del cortado comenzamos a ver la canaleta de Arbayún. Esta se extiende paralela a la pared natural y se asienta sobre pilares de cemento que reforzarían los originales. La canaleta fue construída en 1928 y conduce el agua del manantial de Bigüezal, que nace en el interior de la Foz de Arbayún, hasta Lumbier. Se trata de una obra de ingeneria que supuso todo un reto de construcción, ya que antes de llegar a la localidad transcurre por las paredes de la foz, en un camino artificial abierto en la propia pared, a muchos metros de altura del fondo de la garganta excavada por el Salazar.
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Conforme ascendemos por la base de piedra encontraremos un antigua caseta, probablemente utilizada para guardar las herramientas de mantenimiento de la canaleta. |
La ermita de San Adrián
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Ermita de San Adrían. Tan solo conserva la puerta de acceso y las paredes. La pared del fondo es el propio acantilado. |
Finalmente, tras un incómodo ascenso por un camino que pronto desaparecerá, encontramos la antigua ermita de San Adrián. Desconocemos su origen y, si bien existe un documento dónde se hace referencia a una supuesta donación de la misma por Sancho el Mayor, al Monasterio de Leyre, en 1030, al parecer el documento carece de veracidad.
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Detalle del interior. |
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Fondo de la nave. |
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Depósito de control de la canaleta, junto a la ermita. La canaleta continua avanzando paralela a la pared, en su camino hacia la Foz de Arbayún. |
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La vegetación amenaza con engullir para siempre los restos de la ermita. |
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